Hernia de disco: cómo la quiropráctica puede ayudarte a aliviar el dolor y mejorar tu calidad de vida

 

¿Qué es un disco intervertebral y por qué es importante?

 

La columna vertebral está formada por vértebras separadas por discos intervertebrales, cuya función principal es:

• Amortiguar impactos.

• Permitir el movimiento.

• Proteger las estructuras nerviosas.

 

Cada disco tiene un centro blando (núcleo pulposo) y una capa externa más resistente (anillo fibroso). Con el paso del tiempo, estos discos pueden perder hidratación y elasticidad, volviéndose más vulnerables al estrés mecánico.

 

¿Qué es una hernia de disco?

 

Una hernia de disco ocurre cuando parte del núcleo del disco se desplaza hacia afuera debido al debilitamiento del anillo fibroso. Si este material entra en contacto con un nervio, puede producir síntomas como:

• Dolor localizado o irradiado.

• Hormigueo o adormecimiento.

• Sensación de debilidad muscular.

 

Es importante saber que el desgaste del disco es un proceso natural, pero la hernia suele estar asociada a sobrecargas, movimientos repetitivos o esfuerzos mal realizados.

 

Zonas más frecuentes de hernia discal

 

🔹 Hernia cervical

Puede generar dolor en cuello, hombros, brazos o manos. En consulta quiropráctica es frecuente encontrar relación con malas posturas, estrés mecánico repetido o lesiones deportivas.

🔹 Hernia dorsal

Es poco común, debido a la rigidez natural de la columna torácica. Cuando aparece, suele asociarse a alteraciones biomecánicas específicas.

🔹 Hernia lumbar

La más frecuente. Puede provocar dolor lumbar y ciática, con molestias que recorren la pierna. Suele empeorar al estar mucho tiempo sentado, al cargar peso o al realizar esfuerzos bruscos.

 

¿Cómo puede ayudar la quiropráctica en la hernia de disco?

 

La quiropráctica no trata “solo el disco”, sino que aborda el funcionamiento global de la columna y el sistema nervioso. Tras una evaluación completa, el quiropráctico puede diseñar un plan de cuidado individualizado que incluya:

• Ajustes quiroprácticos específicos y seguros, adaptados a cada caso.

• Mejora de la movilidad articular y reducción de tensiones.

• Disminución de la presión mecánica sobre los nervios.

• Recomendaciones posturales y ergonómicas.

• Ejercicios de apoyo para fortalecer y estabilizar la columna.

 

En muchos pacientes, este enfoque contribuye a reducir el dolor, mejorar la movilidad y favorecer la recuperación funcional, evitando o retrasando tratamientos más invasivos. ¿Es segura la quiropráctica en casos de hernia discal?Cuando existe una hernia de disco, la evaluación es clave. No todos los pacientes son iguales ni todas las hernias se manejan de la misma forma.

El quiropráctico:

• Evalúa la historia clínica, los síntomas y los estudios de imagen cuando están indicados.

• Evita técnicas contraindicadas en casos específicos.

• Deriva al especialista correspondiente si detecta signos que requieren otro abordaje.

 

La seguridad del paciente es siempre la prioridad. ¿La cirugía es siempre necesaria?

No. La mayoría de las hernias discales mejoran con tratamiento conservador. La cirugía se considera solo en casos concretos, como déficit neurológico progresivo o dolor que no responde a otras opciones.

Por eso, un enfoque conservador bien indicado, como el quiropráctico, suele ser una excelente primera línea de manejo.

 

Un tratamiento personalizado marca la diferencia: Cada persona tiene una historia distinta, un estilo de vida diferente y una columna única. En quiropráctica, el objetivo no es solo aliviar el dolor, sino mejorar la función, prevenir recaídas y ayudar al paciente a recuperar confianza en su movimiento…En conclusión

 

• La hernia de disco es una condición frecuente, pero no siempre grave.

• Muchas personas mejoran sin cirugía.

• La quiropráctica puede ser una opción segura y efectiva en casos bien evaluados.

• Un abordaje individualizado es fundamental para obtener buenos resultados.

 

Si presentas dolor de espalda, cuello o síntomas irradiados, una evaluación quiropráctica puede ayudarte a entender tu condición y elegir el mejor camino hacia tu recuperación.

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